En cuanto al trabajo de fuentes se fundamenta en la oralidad, creando documentos a base de entrevistas, en primer lugar consultando a los trabajadores de la fabrica Yarur, los cuales son de variadas generaciones, tomando en cuenta así una construcción historiográfica de la industria textil desde abajo, de esta manera va revelando e interpretando sus opiniones y enfoques con respecto a la línea de la obra. No solo está la oralidad de las masas, sino que también de la elite y de la clases media, a la familia Yarur –Nicolás y Jorge- dan sus opiniones y experiencias, facilitando al comprensión del nacimiento de la empresa en la biografía del fundador, además entrevista a grandes personajes de la historia política chilena, como es el caso de Salvador Allende, Jacques Chonchol, Orlando Letelier, entre otros, creando la fuente de la elite política. Por este método, esta el testimonio de los personajes que indirectamente tuvieron una relación con Yarur, vecinos de la fabrica, dirigentes sindicales y políticos, amigos de los Yarur y cercanos a su esfera de influencia, creando de este modo un cuadro global de la problemática a tratar. El uso de archivos de diferente naturaleza, entregan una mayor información, sobre la situación. Archivos de la empresa, del Ministerio del Trabajo, de Hacienda y Economía, de la CUT y actas del Sindicato y del directorio de Yarur, permiten así un trabajo de miradas diferentes, dentro de este triangulo trabajadores, empresario y Estado. El análisis de discursos y de fuentes impresas de las diferentes colectividades sociales, políticas y económicas, como son los mensajes presidenciables, panfletos de los movimientos de la izquierda y estudios económicos de la Corfo. Incluye el trabajo fuentes de la prensa, tanto nacional como internacional, asimismo un gran trabajo de recopilación de datos estadísticos. Por último, un apoyo bibliográfico de peso, armando así una plataforma en al cual construir y desde diversos frentes esta revolución de los tejedores.
Un punto interesante es el trabajo de Winn, gran parte del trabajo fue prácticamente de haber ocurrido los hechos, ya que la mayoría de las entrevistas tienen fechas durante el periodo de la Unidad Popular, lo que da prueba que el autor, estuvo en medio de os acontecimientos, conversando con los trabajadores, especialmente en el periodo que la industria fue requisada y estatizada. Dentro del trabajo literario, el lector puede sentir las emociones y sentimientos de lo sujetos populares, tanto en la explotación, en la liberación y en la posterior caída de la Unidad Popular. Es medularmente un trabajo histórico del presente, de la misma forma que lo hizo hace 2500 años antes Tucídides con su Guerra del Peloponeso, registrando e interpretado sus fuentes mas con el oído que con lo escrito, pero en este caso los archivos entregan riqueza a la obra. Peter Winn, sabia que se encontraba en un acontecimiento histórico de trascendencia en la historia nacional, la cual era vital que se conociese, un hecho coyuntural que reflejó un efecto dominó en la estatización de sector privado y en la gestión del la contrarrevolución.
Pero a pesar de tomar fuentes de todos los sectores participantes, el autor toma partido por un facción, que es el mundo del trabajo, de los explotados, notándose en el lenguaje y en los epítetos que utiliza contra la familia Yarur, lo que nota la subjetividad y peligrosidad de hacer notar tanto una visión, que puede generar cierta aversión al sector burgués que generar conciencia en ella. Esta crítica a los sectores amarillos o apatronados, que por miedo o por lealtad casi feudal, no estaban dispuestos a llevar “la contra” al dueño, y los rojos que son descritos como “héroes”, sujetos que prácticamente “evangelizan a las masas proletarias” concientizandolos en una primera instancia en pro de la reivindicación de los derechos laborales y luego en la conquista de su fuente de trabajo. Winn destaca la libertad, la igualdad y fraternidad entre los trabajadores, pero se contradice, ya que un sector fue marginado y los privados perdieron el fruto de años y esta revolución desde abajo mina las bases de los cambios que Salvador Allende tenía proyectado, la tónica del autor de anteponer esta lucha de clases se oscurece con la interpretación final de la lucha de la elite revolucionaria contra las bases de la Revolución. A pesar de ser muy cercano a la verdad de los hechos, con un trabajo heurístico de excelencia, se aleja hermenéuticamente de las otras visiones sociales, catalogándolas de parcialistas, egoístas y apatronadas, que van en contra de los derechos del sufriente proletariado.
En conclusión esta obra, “Tejedores de la Revolución”, es un trabajo panorámico y detallista, registra lo micro insertándolo en los grandes procesos históricos de Chile y del mundo, trabaja lo local relacionándolo con lo nacional. Trabaja la dialécticas marxciana de la lucha de clases y de los procesos de acumulación de la burguesía. La recopilación de fuentes es variada y matizada, no dejando lugar a vacíos desde el enfoque superior e inferior. Como lector, un queda con ese gusto de porque no ganaron los buenos, ya que fueron descritos con una dulzura tractiva y los malos como algo desechable. Pero como historiador, produce cierta aversión tanta inclinación, entendiendo que el paradigma usado es casi imposible no dejar de lado.